Pals es un pueblo medieval encantador situado en la Costa Brava. Su casco antiguo, con calles adoquinadas y edificios de piedra, transporta al pasado. Se puede visitar la Torre de las Horas, la iglesia de Sant Pere y el mirador Josep Pla, con vistas al Empordà.
En la costa, destaca la Playa del Racó, ideal para relajarse, y la Isla Roja, una cala singular con acantilados. También se pueden realizar rutas a pie o en bicicleta por los arrozales y entornos naturales, descubriendo la belleza paisajística que rodea este pueblo gerundense.
En Pals, la cocina tradicional gira en torno a productos locales y recetas del Empordà. El plato estrella es el arroz de Pals, cultivado en la zona, que se prepara de diversas formas: arroz a la cazuela con carne y verduras, con pescado o marisco. También son típicos los “suquets” de pescado y los caracoles a la lata. Se puede degustar la cocina del Arròs de Pals en cualquiera de los restaurantes del resort: en el restaurante Golf de Pals, Aquamare o Havana Beach Club .